Los estereotipos son
imágenes simples de lo que un cierto tipo de persona es o hace, y se utilizan
ampliamente para informar o influir en las percepciones de la gente acerca de
los demás, a menudo de forma incorrecta.
Un estereotipo puede ser racial,
religioso, sexual o incluso social, y puede ser el resultado de un incidente
conocido o actitud de años antes, o simplemente el resultado de rumores
prevalentes. Los estereotipos pueden afectar a distintos ámbitos de la sociedad. Los estereotipos pueden ser negativos, positivos o
neutros, y los hay sobre cualquier grupo humano que se nos ocurra definir
(personas que montan en bicicleta, miembros de la tuna, hombres que llevan
pendientes, estudiantes de enfermería, personas que tienen un caballo...)
Qué funciones cumplen los estereotipos:
• Ayudan a organizar rápidamente la nueva
información y a recuperar los recuerdos como cualquier sistema de
clasificación, permiten que la información esté ordenada en nuestro cerebro.
• Permiten realizar atribuciones causales rápidas.
Podemos explicar la causa del comportamiento de una persona por su pertenencia
a un determinado grupo cuyas características creemos conocer.
• Sustituyen carencias de información, permitiendo
explicar de forma sencilla las diferencias entre individuos y grupos y predecir
cómo se va a comportar la gente.
• Ahorran energía a la vez que facilitan la toma de
decisiones eficiente.
Jennifer García C.I.
23.307.251
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